Un resumen
Senderos, una organización sin fines de lucro con sede en Santa Cruz, enfrenta recortes de financiamiento por parte del National Endowment for the Arts. La organización recibió un correo electrónico el viernes por la noche de la agencia federal notificando que ya no recibirá una subvención de $10,000.
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Casi una semana después de su celebración de la cultura oaxaqueña, la organización sin fines de lucro Senderos de Santa Cruz dijo que vio cancelada una subvención federal como parte de los recortes de la administración Trump al National Endowment for the Arts.
La organización, que enseña cultura e historia latina a través de la danza y la música, recibió un correo electrónico el viernes por la noche de la agencia federal de artes notificando que ya no recibirá la subvención de $10,000, dijo el director ejecutivo Isai Pazos. El NEA anunció a Senderos como beneficiario de su programa de subvenciones Challenge America el 14 de enero, pocos días antes de que el presidente Donald Trump regresara a la Casa Blanca.
En el correo electrónico, compartido por Senderos con Lookout, el NEA dijo que está “actualizando sus políticas de otorgamiento de subvenciones para enfocarse en financiar proyectos que reflejen el rico patrimonio artístico y la creatividad de la nación, según lo priorizado por el Presidente.”
El NEA está dando prioridad a financiar proyectos que apoyen a universidades y colegios históricamente afroamericanos, instituciones al servicio de hispanos y celebraciones del 250 aniversario de la independencia de Estados Unidos, según el correo electrónico. También incluyó proyectos que “fomenten la competencia en inteligencia artificial, empoderen a las casas de culto para servir a sus comunidades, ayuden con la recuperación ante desastres, promuevan empleos en oficios especializados, hagan a Estados Unidos saludable de nuevo, apoyen a militares y veteranos, apoyen a comunidades tribales, hagan que el Distrito de Columbia sea seguro y hermoso, y respalden el desarrollo económico de comunidades asiático-americanas.”
Las cancelaciones de subvenciones entran en vigor el 31 de mayo. Las organizaciones afectadas por los recortes tienen hasta el 30 de junio para hacer una solicitud final de fondos, si los proyectos se completan antes de que finalice mayo. Las organizaciones tienen siete días para apelar los recortes si creen que sus proyectos se alinean con las nuevas prioridades de la agencia descritas en la carta, según el correo electrónico. Senderos no ha considerado realmente presentar una apelación, dijo Pazos.
La subvención Challenge America fue eliminada a principios de febrero en medio de la ofensiva de Trump contra los programas de diversidad, equidad e inclusión. Challenge America ofrecía subvenciones individuales a organizaciones pequeñas, como Senderos, que extienden su alcance a comunidades desatendidas.
A pesar de saber que el programa estaba siendo eliminado, Senderos esperaba que el NEA aún respetara las subvenciones que ya había aprobado para 2025, dijo la asesora de la junta Carolyn Coleman por correo electrónico.
Los recortes de financiamiento siguen a la publicación de la propuesta de presupuesto de la administración Trump, que pedía la eliminación del NEA, el National Endowment for the Humanities y el Institute of Museum and Library Sciences.
“No fue una sorpresa, solo una decepción,” dijo Pazos. Con todos los cambios de política y presupuesto que están ocurriendo a nivel federal, la organización ya se estaba preparando mentalmente para un escenario así, él dijo. Este habría sido el tercer año que Senderos habría recibido la subvención.
Senderos usó el dinero de la subvención para financiar programación como clases de música y danza, incluyendo estipendios para maestros, instrumentos y cualquier material necesario para las clases, dijo Pazos. La organización ofrece todas sus clases de forma gratuita.
La organización sin fines de lucro planeaba usar los fondos de este año para ofrecer estipendios a los artistas.
Ahora Senderos se enfrenta al reto de encontrar otras formas de llenar ese vacío financiero, como recaudaciones de fondos, que fue cómo la organización financiaba sus actividades en sus primeros años, él dijo. “No somos los únicos enfrentando este desafío; otras organizaciones sin fines de lucro están en la misma situación,” dijo Pazos.
Aunque el momento del anuncio del NEA no fue ideal —casi una semana después de su vigésima guelaguetza que casi no se lleva a cabo debido a temores migratorios— Pazos dijo que está intentando ver la situación con una actitud positiva.
“Creo que si no hubiéramos tenido el evento y luego recibido esta noticia, nos habría afectado un poco más,” él dijo. “Creo que haber realizado el evento, continuar con el evento, que la comunidad haya asistido para apoyar, creo que eso fue un éxito.”
Lo importante, dijo Pazos, es que la comunidad tuvo la oportunidad de celebrar una tradición oaxaqueña que ha existido durante 20 años. “Los ingresos vienen y van, y creo que es algo bueno que sigamos celebrando. Queremos terminar esto con una nota positiva,” él dijo.